Este fin de semana nos hemos desplazado a Sevilla para pasarlo con nuestra hija Sonia. Al día siguiente marchamos hasta Cádiz, única ciudad de Andalucía que todavía no había visitado y que tenía muchas ganas de conocer. "Cuando vivía mi padre, me recordaba que había hecho el servicio militar en esta ciudad durante la guerra civil, en el cuerpo de intendencia y que allí, aún siendo muy joven; había aprendido a cocinar las paellas secas de las que él siempre presumía". También me hablaba de lo bonita que era la ciudad, él la llamaba "la tacita de plata" y le encantaban sus playas y atardeceres.
Paseamos por el paseo marítimo (al fondo la catedral que preside la bahía), con sus murallas y desembocamos en la plaza de la Constitución con sus Puertas de Tierra
Como ese fin de semana se celebraba el Carnaval, nos encontramos con numerosas comparsas que nos deleitaron con sus "murgas"
Después del largo paseo degustamos un arroz seco y unos pescado en La Pepa.
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