MIS RECETAS

jueves, 18 de abril de 2019

LEYENDA DE NUESTRO PADRE JESÚS II



    " Uno de los amores más sinceros lo hallan los jiennenses en la venerada imagen de Jesús Nazareno.
   Esta devoción no se adquirió de forma circunstancial, es heredada. Los padres, siguiendo una tradición, llevan a sus pequeños ante la imagen de Jesús para enseñarles las primeras oraciones.
     Es tanta la atracción que ejerce y tan honda la ternura que inspira, que la ciudad de Jaén le aclama y venera con el dulce y amoroso título de Padre."   (D. Manuel Mozas Mesa).


     COMO FUE HECHA LA IMAGEN.
  
     Su origen es extraordinario y conserva el perfume de la leyenda.
   Solamente hay variación sobre el emplazamiento donde sucedió el prodigio. Para algunos, este acaeció en una casa de labor, próxima a donde hoy se levanta la iglesia de la Merced allá por el año 1580.
     Para la mayoría, se efectuó en la casería de Jesús, que de ello tomó el nombre que aún conserva.
  " En esta finca de olivos, de los aledaños de la capital, (en la carretera del Puente de la Sierra), habitaban sus propietarios, un matrimonio de laboriosas costumbres, cuyo vivir caminaba ya hacia su ocaso.

     

VISTA PANORÁMICA DE LA CIUDAD, A LA DERECHA LUGAR DEL PRODIGIO.


   A la entrada de la casa, había un grueso tronco, procedente de algún árbol centenario, de extraordinarias dimensiones.
    Cierta tarde, a la puesta de sol, vieron venir por el sendero que conducía a la casa a un viejo de aspecto venerable, que marchaba lentamente, con evidentes señales de cansancio.
    No era vecino de Jaén, era un pobre caminante, que solicitó pasar la noche en la casería; los dueños accedieron a su deseo con gran caridad cristiana. Antes de entrar en la casa, el anciano, fijándose en el grueso leño, exclamó:
-  !Qué hermoso Jesús se haría de él!
     Los ojos del matrimonio interrogaron al viajero, mientras que los del mozo de labor presente en la escena, le miraban asombrados e incrédulos.
    A la muda pregunta, el viejo, que parecía abstraído, asentía con movimientos afirmativos de cabeza.  -Me basta con que transportéis este leño a la habitación más apartada, pues los muchos años restáronme las energías necesarias y yo os aseguro que pasado un día este grueso tronco lo veréis convertido en un nazareno.
    Por toda respuesta el amo y el criado, tras muchos esfuerzos, lograron llevar al sobrado el corpulento tronco.
     El anciano imaginero rehusó cortés el participar en la cena, que con agrado le ofrecían, pues más que alimento, necesitaba descanso. Antes de retirarse, advirtió que no le interrumpieran en su labor de talla, a la que desde la madrugada siguiente pensaba consagrarse.
     Consumidos de impaciencia los cónyuges y el mozo, dejaron transcurrir la mañana, respetando con fidelidad lo aconsejado por el viajero artista, aunque observaron, con no poca extrañeza, que no se sentía ruido o golpe de ninguna clase. Y ya, mediada la tarde, no pudiendo refrenar por más tiempo su curiosidad, ascendieron silenciosos por la estrecha escalera hasta el desván; y al abrir la puerta, que se hallaba entornada.. contemplaron maravillados un hermoso Jesús Nazareno con la cruz a cuestas.
     El viejo escultor, artista meritísimo como lo proclamaba obra tan perfecta, había desaparecido y jamás volvió a saberse nada de él ".


     Como símbolo de aquel momento, el "Abuelo" (como cariñosamente se le denomina), lleva ceñidas en plata las llaves del cortijo, que son distintas de las que cuelga de sus manos y que son copia exacta de las de un antiguo hospital cuyos enfermos y el resto de la población, sanó milagrosamente de un brote de peste que diezmaba la ciudad en el siglo XVII.


                                              

CAMARÍN  DE JESÚS

     La talla permaneció en el cortijo hasta que fallecieron sus dueños; después fue trasladada al convento de Carmelitas descalzas donde recibió culto, a la iglesia de la Merced, a la santa iglesia Catedral y, actualmente se encuentra en el Camarín de Jesús.
     Se trata de una talla de gfinales del siglo XVI o principios del XVII que algunos atribuyen a Sebastián de Solis.




EN SU SALIDA DE LA IGLESIA DE  LA MERCED


     En cuanto a la cruz procesional, propiedad de la marquesa de Blancohermoso, fue donada definitivamente en la década de los ochenta a la Santa iglesia Catedral, donde se custodia en la funda que igualmente cedió la propietaria. En la cruz (que no consintió en agrandar, aunque sus hijos si lo permitieron después) está grabada una oración: "Todas las cruces son flores, si las sabemos llevar.." compuesta por la propia dueña.
   
   




     
          Feliz Semana Santa a mis lectores.